El HTTP (Protocolo de Transferencia de Hipertexto) es un protocolo de comunicación empleado en redes de
computadoras para la transferencia de datos en la World Wide Web (WWW). Funciona como el medio a través
del cual los navegadores web (como Google Chrome, Mozilla Firefox, Safari, entre otros) pueden solicitar
y recibir páginas web desde servidores web.
Cuando un usuario introduce una dirección web en su navegador, este envía una solicitud HTTP al servidor
web que aloja la página específica solicitada. A su vez, el servidor web responde a esta solicitud
mediante el envío de la página web al navegador del usuario.
HTTP es un protocolo sin memoria, lo que implica que no retiene información sobre solicitudes previas.
Cada solicitud HTTP se considera única e independiente. Además, HTTP opera en la capa de aplicación, lo
que significa que opera en el nivel superior del modelo OSI (Interconexión de Sistemas Abiertos) y se
emplea para la transferencia de datos entre aplicaciones en diversos dispositivos de red.
El DNS (Sistema de Nombres de Dominio) es un sistema empleado en Internet para convertir nombres de
dominio en direcciones IP. En términos simples, el DNS funciona como una especie de directorio
telefónico que vincula nombres de dominio (como google.com) con direcciones IP (como 172.217.6.110), las
cuales son números utilizados por los dispositivos para comunicarse en Internet.
Cuando un usuario ingresa una dirección web en su navegador, el navegador envía una solicitud al
servidor DNS para obtener la dirección IP correspondiente al nombre de dominio. El servidor DNS busca en
su base de datos y devuelve la dirección IP al navegador, que luego emplea para establecer conexión con
el servidor web adecuado y cargar la página web requerida.
El DNS resulta fundamental para el funcionamiento de Internet, ya que posibilita que los usuarios
accedan a sitios web y otros servicios en línea a través de nombres de dominio memorables, en lugar de
tener que recordar complicadas direcciones IP numéricas. Además, el DNS también permite la configuración
de servidores de correo electrónico, servidores de archivos y otros servicios de red.
FTP (Protocolo de Transferencia de Archivos) es un protocolo de red empleado para el intercambio de
archivos entre sistemas conectados en una red. Es uno de los protocolos más antiguos y ampliamente
usados en Internet.
FTP opera bajo un modelo cliente-servidor, en el cual un cliente se enlaza con un servidor FTP para
llevar a cabo la transferencia de archivos. El cliente emite comandos al servidor para iniciar, detener
o pausar la transferencia de archivos. El servidor FTP responde a estos comandos y suministra al cliente
detalles acerca de los archivos disponibles para descargar o cargar.
Este protocolo emplea dos canales de comunicación: el canal de control y el canal de datos. El canal de
control se dedica a la transmisión de comandos y respuestas entre el cliente y el servidor, mientras que
el canal de datos se utiliza para efectuar la transferencia de los archivos en sí.
No obstante, FTP carece de seguridad, puesto que no encripta los datos intercambiados entre el cliente y
el servidor. Por consiguiente, se sugiere el uso de SFTP (Protocolo Seguro de Transferencia de Archivos)
o FTPS (FTP sobre SSL/TLS) para asegurar una transferencia de archivos protegida.
WWW son las iniciales de World Wide Web, que se traducen al español como "Red de Alcance Mundial". Esta
es una de las aplicaciones más conocidas de Internet, que posibilita a los usuarios acceder y compartir
información a través de documentos multimedia, como páginas web, imágenes y vídeos.
La World Wide Web se fundamenta en el protocolo HTTP (Protocolo de Transferencia de Hipertexto), que
facilita la transferencia de datos entre servidores y clientes. Estos documentos multimedia se organizan
en páginas web, a las cuales se puede acceder mediante navegadores web como Google Chrome, Mozilla
Firefox, Safari, entre otros.
La WWW está formada por una vasta cantidad de páginas web, alojadas en servidores ubicados en todo el
mundo. Los usuarios pueden llegar a estas páginas web a través de enlaces o URL (Localizador Uniforme de
Recursos), que indican la ubicación de la página en la red.
En resumen, la World Wide Web es una aplicación de Internet que capacita a los usuarios para acceder y
compartir información a través de documentos multimedia por medio de páginas web, utilizando el
protocolo HTTP y navegadores web.
La base del WWW reposa en cuatro componentes esenciales: un nuevo protocolo de comunicación (HTTP o
Protocolo de Transferencia de Hipertexto); un lenguaje para crear documentos hipermedia (HTML o Lenguaje
de Marcado de Hipertexto); un sistema de notación para identificar objetos en Internet y las acciones a
ejecutar sobre ellos (URL o Localizador Uniforme de Recursos); y, finalmente, un conjunto de
aplicaciones (los navegadores o exploradores web y los servidores httpd) que se reparten las tareas de
suministrar y presentar la información multimedia al usuario.
CDN representa las iniciales de Content Delivery Network, cuya traducción al español es Red de
Distribución de Contenido. Una CDN es una infraestructura de servidores dispersos geográficamente que se
emplea para agilizar y optimizar la entrega de contenido a los usuarios finales.
Cuando un usuario pide cierto contenido, como una página web o un video, la solicitud se dirige al
servidor más cercano de la CDN en lugar del servidor original donde se encuentra alojado el contenido.
Esta acción reduce la distancia que debe recorrer la información y, en consecuencia, eleva la velocidad
de carga y la calidad de la experiencia del usuario.
Asimismo, una CDN también puede colaborar en disminuir la carga sobre el servidor original, dado que los
servidores pertenecientes a la CDN son capaces de manejar un considerable número de requerimientos de
contenido. Este enfoque puede contribuir a mejorar la capacidad de adaptación y la disponibilidad del
sitio web o la aplicación.
En síntesis, una CDN representa una red de servidores que se implementa con el propósito de agilizar y
optimizar la entrega de contenido a los usuarios finales, con el fin de mejorar la velocidad de carga y
la vivencia del usuario, al mismo tiempo que disminuye la carga sobre el servidor original.
TCP/IP es un conjunto de reglas de comunicación adoptadas para conectar dispositivos en redes de
computadoras. TCP/IP es una abreviatura que hace referencia a Transmission Control Protocol/Internet
Protocol, y es el conjunto de normas de red de mayor uso a nivel global.
El protocolo TCP tiene la responsabilidad de descomponer los datos en segmentos más pequeños y
transmitirlos de forma segura y ordenada a lo largo de la red. Asimismo, TCP supervisa la congestión de
la red y se asegura de que los segmentos se entreguen de manera adecuada.
Por su parte, el protocolo IP asume la tarea de dirigir los segmentos de datos a lo largo de la red. IP
utiliza direcciones IP únicas para identificar los dispositivos presentes en la red y para establecer la
vía más eficiente para remitir los segmentos.
TCP/IP se pone en práctica en una amplia gama de aplicaciones, que abarcan la navegación en la web, el
envío de correos electrónicos, la transferencia de archivos y la videoconferencia. Se erige como un
protocolo de red esencial para el entorno de comunicación online y resulta fundamental para el correcto
funcionamiento de Internet.
El Modelo de Objeto de Documento, abreviado como DOM (del inglés Document Object Model), es una
representación programática de la estructura y contenido de un documento HTML o XML. El DOM permite a
los programadores acceder, modificar y manipular dinámicamente los elementos y contenido de una página
web o un documento XML utilizando lenguajes de programación como JavaScript.
El DOM organiza los elementos del documento en una estructura de árbol, donde cada elemento (como
etiquetas HTML, atributos y texto) se representa como un nodo en el árbol. Los nodos del DOM pueden ser
navegados y manipulados mediante scripts, lo que permite a los desarrolladores realizar acciones como:
Acceder a elementos HTML: Puedes seleccionar elementos específicos en una página web utilizando métodos
como getElementById, getElementsByClassName, getElementsByTagName, o consultas más avanzadas utilizando
querySelector.
Modificar contenido: Puedes cambiar el contenido de un elemento, ya sea su texto interno o sus
atributos, utilizando JavaScript. Esto permite la actualización dinámica de una página web sin necesidad
de recargarla.
Agregar y eliminar elementos: Puedes crear nuevos elementos HTML y agregarlos al documento, o eliminar
elementos existentes. Esto es útil para la creación de elementos de interfaz de usuario
dinámicos.
Manipulación de estilos y clases: Puedes cambiar los estilos CSS de un elemento o agregar/quitar clases
CSS para cambiar la apariencia de una página web en respuesta a eventos o interacciones del
usuario.
Escuchar eventos: Puedes agregar controladores de eventos para detectar y responder a acciones del
usuario, como hacer clic en un botón o mover el mouse sobre un elemento.
El DOM es una parte esencial del desarrollo web front-end y es utilizado en conjunto con lenguajes como
JavaScript para crear aplicaciones web interactivas y dinámicas. Cada navegador web proporciona su
propia implementación del DOM, pero siguen estándares específicos como el DOM nivel 1, nivel 2 y nivel
3, definidos por el W3C (World Wide Web Consortium), para garantizar la interoperabilidad entre los
navegadores.
Landing Page
Una landing page, también conocida como página de destino o página de aterrizaje, es una página web
diseñada específicamente para convertir a los visitantes en leads o clientes potenciales. Estas páginas
suelen ser parte de una estrategia de marketing digital y publicidad en línea.
Las landing pages se utilizan para promocionar un producto, servicio, oferta o evento específico y se
centran en una llamada a la acción (CTA) clara. El objetivo principal de una landing page es persuadir a
los visitantes para que realicen una acción deseada, como suscribirse a una lista de correo, descargar
un recurso, completar un formulario, comprar un producto o registrarse para un evento.
Características comunes de una landing page efectiva incluyen:
1. Contenido conciso y centrado en el tema: La información en la página debe ser clara y directa,
evitando distracciones innecesarias.
2. Diseño atractivo: Un diseño visualmente atractivo que resalte la oferta y guíe al visitante hacia la
acción deseada.
3. Llamada a la acción (CTA) destacada: Una CTA prominente que sea fácil de identificar y que invite al
usuario a actuar.
4. Información relevante y convincente: Debe proporcionar información relevante sobre el producto o
servicio que se está promocionando, y explicar los beneficios para el visitante.
5. Formularios sencillos: Si se requiere que el visitante complete un formulario, este debe ser breve y
fácil de completar.
6. Pruebas sociales: Incluir testimonios, reseñas o logotipos de empresas reconocidas puede ayudar a
generar confianza.
7. Diseño y contenido adaptados al público objetivo: La landing page debe estar diseñada pensando en el
público al que se dirige, con un lenguaje y estilo adecuados.
8. Responsividad: Debe ser compatible con dispositivos móviles para que los visitantes puedan acceder a
ella desde diferentes tipos de dispositivos.
Las landing pages son una herramienta valiosa en el marketing digital y suelen formar parte de campañas
de publicidad en línea, como anuncios de Google Ads, anuncios de Facebook, campañas de correo
electrónico y más. Su éxito se mide en función de la tasa de conversión, es decir, la proporción de
visitantes que completan la acción deseada en comparación con el total de visitantes que llegan a la
página.